miércoles, 6 de agosto de 2008

Con un maldito demonio... ¡Pekín!

Agencia de viajes, hace como un mes. Atraviesa la puerta cierto pendejete recién salido de la pubertad con actitud mamonesca y farolez en exhibición. Se acerca con la amable y afable agente de viajes y en tonito RBDesco le pregunta "¿Cuánto cuesta el boleto a beiyin?". La esrrita en cuestión le responde con tono aburrido: "1,850 dólares". A lo que él responde seguro de sí mismo: "...órale, ¿Y así quieren que vayan a las olimpiadas? Está carísimo... Y qué, para 5 ó 6 horas de viaje..." a lo que la niña, ya aturdida de la sapiencia monsivaiesca del pseudoescuincle, le responde "Son casi 16 horas de viaje a Pekín...".

"¿Pekín?, ¡Pero si yo quiero ir a beiyin!"

Que levante la mano el que haya oído hablar de Beijing antes de anunciarse las olimpiadas del 2008. ¿No? ¿Nadie? ¡Pues claro que no! No existe Beijing en el idioma español. El nombre de la ciudad en castellano es Pekín y una vez más acuso a los medios de volver ignorantes a la tercera parte de la población y pendejos a otro tercio. El último tercio está muy ocupado buscando qué comer como para andarse preocupando por las olimpiadas.

Alrededor del 1910 se acordó en la Asamblea de Correos Imperiales hacer un sistema postal chino mediante el cual se pudiera dar nombres (basándose en lenguas y dialectos) a las ciudades y provincias chinas con el alfabeto latino como lo conocemos en esta parte del mundo. Este sistema fue mundialmente aceptado y se implementa gracias a los ingleses que en ése tiempo tenían muchos negocios y tratos comerciales con China lo que les facilitaba enviar correspondencia, paquetería y embarques a ésa parte del mundo.

Este sistema no fue sustituido por la República Popular China sino hasta 1979, año en que decidió aceptar como única forma de traducción al alfabeto latino al Pinyin, que es el "sistema de transcripción fonética del chino mandarín mediante el alfabeto latino". Este sistema fue muy bien recibido por los gringos mas no por el resto del mundo, específicamente el habla romance.

El español, italiano, rumano y portugués siguen tomando el nombre de Pekín para designar a la capital china. El código aeronáutico de la ciudad es PEK. La única razón (y muy importante) por la cual se usa Beijing es porque es oficial por parte del gobierno chino, pero no por eso México va a dejar de ser Mexique en francés, Méjico en España o "Meshico" en chino (como sea que lo escriban).

Insisto, ¡Oh, gran perro Bermúdez! ¿Cómo es que vamos a llamarle de ahora en adelante? por cierto, ¿Alguien ha oído hablar de Guangzhou? Pero qué chingona es la comida cantonesa, ¿No?

Se los dejo de tarea...

Ora sí me estoy tardando un rato en las entradas así que lo vamos a dejar en "hasta la próxima".

2 comentarios:

Unknown dijo...

Wikipedia dice:
Peking is the name of the city according to Chinese Postal Map Romanization, and the traditional customary name for Beijing in English (passports issued by the British Embassy are still printed as being issued by the "British Embassy, Peking"). The term Peking originated with French missionaries four hundred years ago and corresponds to an older pronunciation predating a subsequent sound change in Mandarin from [kʲ] to [tɕ][11] ([tɕ] is represented in pinyin as j, as in Beijing). It is still used in many languages.

Juan! dijo...

Wikipedia

MY ASS!!!!