miércoles, 22 de febrero de 2012

40 días sin carne

Estoy empezando una nueva etapa en mi vida en la cual no sé bien cómo actuar ya que nunca me había visto en esta penosa stuación. Es complicado y difícil para mí poder externarlo pero es algo que todos ya sabían que tenía que hacer pero yo no me había dado cuenta...

Esto hasta el día de ayer que me agaché a ponerme los zapatos y casi muero asixiado por mi proia panza. Así es, llegó el momento de la dieta.

Pero lo voy a hacer conforme a dos procesos y el primero es empezar con la cuaresma. Esto porque quiero hacer un sacrificio y que sea algo que valga la pena así que aparte estoy haciendo una manda y si me preguntan por qué les voy a contestar con una sonrisa: "Te vale madresss...", pero la manda consiste en no comer carne de res ni carne de cerdo en los próximos 40 días.

Fuerte, no? Esto significa un sacrificio y pues tiene que ser algo que me duela así que adiós tacos y un beso hamburguesas, abrazos a los jochos (de cochinito por lo pronto) y saludos a mi querido chorizo verde (y el que se empiece a reir con esto último... pues ni modo porque no voy a saber) y finalmente mi cariño a los huaraches con bisté que sé que me van a extrañar tanto como yo a ellos. Y ya me estoy empezando a arrepentir...

Así que postearé mis desventuras y desfortunios periódicamente para que pueda yo ser mismo testigo de mi propia entereza... A huevo! Quien me crea lo último me da esperanzas para mi proximamente formada religión.

Día 1. Pss no mames, es el día 1 así que no hubo problema. Espérate a mañana que me empiece a liberar de las toxinas y las hormonas de crecimiento de la carne, de su jugo, su sangre, su sabor, su grasa, su...

No hay comentarios: